jueves, 26 de enero de 2017

Búsquedas

Y entonces llegó el vacío. La calma apareció en su momento, luego de promesas que volvían a derrumbarse, como esos muros mal construidos que una y otra vez se erosionaban, Ya no tenían marcha atrás.

Ella quiere crecer sola, conocerse, aprender de las cicatrices. No necesita a nadie de su lado. A nadie que le reproche cosas que no la describen, cosas que no siente y cosas que no piensa.

Sí, ella desea soltar, sonreír y seguir sonriendo a pesar de las dificultades.

Y finalmente partió. La paciencia y las intenciones de no hacer daño a los demás terminaron por dañarla a ella. “A veces querer ayudar a otros termina por hacernos daño a nosotros mismos”, le dijeron alguna vez.

Ya no presta atención a las mismas promesas de siempre. Como alguien muy apreciado le dijo, "la voluntad te define". Al final ve el camino recorrido y se pregunta si en verdad ella lo hizo. "Te hace falta un poco de confianza", piensa sonriendo.

Deja atrás mucho, más de lo que creía que podía soportar. Saber lo que NO quiere es otro impulso para ella, y lo que sí quiere es una meta dispuesta a alcanzar.

No hay espacio para cargas, para lamentos ni tristezas de otros que buscan convertir en lástima. Por primera vez pensará solo en ella, siempre con la simpatía que la caracteriza, con la energía que quiere irradiar y que puede conseguir dentro de sí.

Cuenta con ella misma, con su libertad y el impulso que la hace despertar cada día.

“Lo que hagas dentro de los próximos tres años definirá tu destino”, esa fue la frase que la vida le dejó cuando creía que no podía más.


Y allí sigue, con  aprendizajes, sin muchas certezas pero con ganas de seguir sintiendo. 

Después de todo, las búsquedas no tienen reglas.